Desconozco cuándo o por qué motivo fue fundada la asociación denominada
Profesionales por la Ética. Sí sé, en cambio, que pasó de ser una organización que nadie conocía y de la que no se había oído hablar, a ser una más de las muchas asociaciones que supuestamente orbitan alrededor de la extrema derecha y de Hazte Oír y que tiene como principal objetivo fomentar la objeción a la asignatura de
Educación para la Ciudadanía (EpC).
Sinceramente, me dan mucha pena estos padres quese han impuesto como meta vital "proteger" a sus hijos en una burbuja virtual de moralina y represión nacionalcatólica. Porque, no nos engañemos, el principal motivo que tienen estas tristes personas para clamar libertad y
aullar que están siendo perseguidos por los que les quieren imponer un pensamiento único, es que en EpC se presenta la sociedad tal y como es, plural y diversa, y se deja claro que no hay nada de inmoral o de innatural en la homosexualidad o que en dos personas del mismo sexo se amen.
Ya han inventado todo tipo de mentiras y de disparates para desprestegiar a esta asignatura, y no voy a hablar de eso ahora porque
sería largo y supongo que de sobra conocido por los que me leen.
En un
post anterior hablábamos de como los prejucios de los redactores echan abajo toda su capacidad informativa y su trabajo periodístico.Algo muy parecido a lo de estos "profesionales" por la ética (PpE), que en realidad parece que sólo se interesan por dos o tres cuestiones, todas ellas parte de las obsesiones habituales entre la extrema derecha española.
En su
curiosísima web encontramos, en efecto, mensajes de apoyo al papa Benedicto XVI, una guía de objeción "de conciencia sanitaria" (sic) al aborto y artículos incendiarios sobre el homosexualismo, (ese palabro inventado en laboratorios mediáticos religiosos para hablar de la homosexualidad), o enlaces
a textos escritos por curas reaccionarios y por, por supuesto, textos apocalípticos e incendiarios sobre EpC. Una asignatura que, según ellos, es un insufrible e intolerable adoctrinamiento moral e ideológico, pone en peligro la libertad de las familias y no sé qué disparates más. Lo único positivo, de hecho, es la licencia CC que usan en su página.
Desmontando a Mariano : hace unos días publicaron en PpE un texto firmado por un tal
Mariano Bailly-Bailliere Torres-Pardo, Padre objetor a Educación para la Ciudadanía y a Educación Sexual Obligatoria (¡toma ya!, yo no firmo mis textos como Soltero a favor de la igualdad y contrario a la discriminación, pero por lo visto para él ser padre y estar en contra de que a sus hijos les cuenten un par de cosas que no se dicen en las iglesias es motivo de orgullo) titulado
Desmontando a Zerolo.
Empieza bien, anunciando una "ruptura" con Zerolo, cuando en realidad no creo que jamás de los jamases hayan estado estos dos señores de acuerdo en nada.
Hasta aquí hemos llegado, Zerolo. Puedes echar a perder tu vida como mejor te parezca. Pero, viviendo como vives de mis impuestos, me veo en la obligación de pararte los pies cuando quieres echar a perder la vida de otras personas y, principalmente, la de mis hijos y el resto de escolares españoles promoviendo el adoctrinamiento sexual de los menores, por decreto ley, según la ideología del colectivo gay.
Este primer párrafo ya es de traca, porque recurre al argumento de lloriqueo fácil de todo buen "liberal" tal como se entiende el término en España: el de "con mis impuestos ...". Con sus impuestos, señor mío, y con los míos, y con los de la verdulera de la esquina, se realizan los programas sociales (entre otras muchas cosas) que se han aprobado en los presupuestos del Estado. Si a usted no le gustan o no está de acuerdo, no le diré que "estamos en democracia y se trata de acatar la voluntad de la mayoría" porque, de momento, no soy tan simple. Basta con que recuerde que con sus impuestos, los de mi vecina, los de su abuela y los de unos señores que viven en Alpedrete se pagan muchas cosas, que gustarán a unos y enojarán a otros. Salir con esta historia no es más que una pataleta, un infantilismo victimista, propio de una persona insolidaria que cree que paga SUS impuestos para satisfacer SUS necesidades y no las de los demás. ¿está usted de acuerdo con que con SUS impuestos se paguen parte de los gastos de la visita de un jefe de estado misógino y homófobo, don Mariano? Sí, de ese que usted está pensando,
ese cuya visita se jalea en la página de PpE.
Luego habla usted del adoctrinamiento sexual (?!) de menores según la ideología del colectivo gay. Debe ser triste pensar a estas alturas que ser homosexual (o no serlo) es una ideología. Siempre creí que esta obsesión con que ser gay es un modo de vida o poco menos que una opinión es debido a la cantidad de homosexuales frustrados y reprimidos que hay en los colectivos que usted frecuenta, ¡probablemente tiene muchos amigos gays, don Mariano! Lo que pasa es que ni ellos se lo dicen, ni probablemente seguirían siendo tan amigos de usted saberlo.
Está claro que usted prefiere otro tipo de adoctrinamiento, ese que se ha estilado durante años y años, en el que se dejaba muy claro quiénes eran los normales y quiénes los desviados, ¡qué fácil era todo!, y que precisamente lo que le molesta es que se haga justicia y se deje de marginar arbitrariamente a una parte de la sociedad, ya desde las aulas.
Continúa el texto con un tópico del que ya hemos hablado (y me temo que hablaremos largo y tendido...) en este blog: el de los pobres homófobos, esas víctimas inocentes, puros y virginales, que sufren la incomprensión de un mundo que ya no les admite.
En unos pocos años habéis pasado de intolerados a intolerantes. Reclamabais una libertad y unos derechos que, ahora, negáis a quienes no participamos del pensamiento único (...)
Lo del
pensamiento único forma parte de su sistema de mitos particular, igual que lo del
lobby gay. Señor, ahora hablo por mi mismo, no en nombre de nadie, ni siquiera de mis lectores. Sí, soy orgullosamente intolerante. No tengo ni pizca de paciencia con personas como usted, que llaman
libertad y
derechos a poder seguir diciendo algo que se reduce a
"siempre se ha dicho que ser maricón es una asquerosidad" y que no tiene ningún fundamento, salvo el de los prejuicios religiosos.Ya se ha dicho miles de veces, pero no todas las opiniones son igual de respetables, y en particular, aquellas que atentan contra los derechos humanos no merecen ninguna credibilidad ni ningún respeto. Yo (ni nadie) tiene por qué respetar unas creencias que se basan en el odio y la marginación del diferente, ni tengo por qué admitir que usted las conserve "porque son mis creencias". Que estén basadas en un libro escrito por pastores nómadas hace miles de años, es irrelevante, no le dan ninguna autoridad ni credibilidad.
La derecha es especialista en jugar con las palabras y redefinirlas a su antojo, pero lo que más me molesta es que nos haga creer que busca la libertad. ¿Dónde estaban unstedes, "profesionales" por la ética, cuando en España la homofobia era ley? Mucho me temo que sé dónde estaban, y no era escribiendo artículos llamando a la reflexión sobre el tema.
Para empezar, deberías caer en la cuenta de que estás haciendo carrera y medrando por tu condición sexual. Eso se llama prostitución. ¿O piensas que tus cargos políticos se deben a otras cualidades? Tu eres el señuelo de ZP para atraer el voto gay.
Ni siquiera voy a entrar en la acusación ad hominem. Aparte de ser un conocido activista LGBT (lo cierto es que yo, que no me muevo ni moví en esos círculos, había oído hablar de él mucho antes que el 2004) su cargo oficial es
Secretario de Movimientos Sociales y Relaciones con las ONG con lo cual es lógico y deseable que se encargue de temas relacionados con el colectivo gay. Lo preocupante sería que hiciera como Ana Botella,que demostró su homofobia en público y ocupó un cargo similar en el ayuntamiento de Madrid (afortunadamente, ahora es concejala de medio ambiente) o que medrara como
Jesús Neira al aceptar de forma bochornosa el cargo que le regaló Esperanza Aguirre, o el señor ese sin estudios ni preparación, que nadie sabe como se llama, y que
será asesor del PP en temas de justicia, según su lógica, se está beneficiándo de la muerte de su hija para ocupar un cargo, ¿no es así? ...
A continuación, el autor intenta argumentar por qué, en su opinión, Zerolo es incongruente:
Declaras que la condición sexual no debe ser motivo de discriminación y tu vives, precisamente, de tu condición sexual. Incongruente.
Nuevamente, argumento ad hominem que no merecería respuesta.En esta frase se oculta con poco disimulo otro tópico, el de que los homosexuales "aireamos" nuestra condición sexual. Ahí están, sin ir más lejos, políticos como Sarkozy o Berlusconi que nos avergüenzan a todos cuando actúan como babosos salidos en presencia de la jamona de turno; pero, en cambio, como Zerolo es abiertamente homosexual, "vive de su condición". Claro, seguro que para don Mariano el ideal es no hacer pública la condición sexual porque no es necesario, algo así como el hipócrita
DADT estadounidense. Obsta decir que la sexualidad humana es pública y notoria y que esta discrección no existe en la práctica.
Propones que las manifestaciones religiosas se limiten al ámbito privado pero organizas cabalgatas de exhibicionistas amén de procurar y financiar con mis impuestos la “visibilidad” del “colectivo gay”. Incongruente.
Churramerinismo de los de libro. Del tema de "mis impuestos" ya hablé antes. Con mis impuestos, don Mariano, el ayuntamiento en que vivo financia una vergonzosa procesión que parece sacada directamente del siglo XIX, de beatas con mantilla y vela dando vueltas en torno a la iglesia mayor, pero no me quejo, ¿ve? porque precisamente se pagan muchas más cosas. Esto, por no entrar en su presunción histérica y desinformada de que el Orgullo es una "cabalgata exhibicionista". ¡Pues claro que hay que trabajar por la visibilidad del colectivo! La prueba es que una persona que supongo culta e instruida como usted sigue asociando homosexualidad con perversión, vicio y antros oscuros, a pesar de que ve (o debería ser capaz de ver) que no es así...
Te parecen rancios y desfasados los “modelos de familia tradicional” pero consideras una conquista histórica el haber alcanzado su equiparación legislativa con las uniones homosexuales. Incongruente.
Aquí entramos en un claro problema de comprensión textual. Los modelos de familia tradicional son desfasados y rancios en el sentido de que son excluyentes, y poco representativos de la realidad social. Por eso mismo, señor mío, y no por otra cosa, es una conquista histórica el que se reconozca el matrimonio entre personas del mismo sexo. Precisamente en nombre de la libertad, y no de la "libertad" que usted defiende, el Estado no tiene por qué decidir qué modelos de pareja son "válidos" y cuales no, siempre que hablemos de los que se dan espontánea y naturalmente entre adultos que consienten en ello.
Sois estériles porque buscáis el mero placer sin abriros al don de la vida, pero reclamáis adopciones proclamando un supuesto derecho en el que no cuentan los derechos del niño, al que consideráis un mero objeto de satisfacción personal. Incongruente.
Me da usted mucha risa y mucha pena, don Mariano, porque está usted condenando como modelos de familia "no válidos" y que deben ser privados de los hijos a su cargo, caso de tenerlos, a los padres o madres solteros, divorciados, a los niños que tienen al padre (o la madre) fuera de casa por cualquier motivo (trabajo, enfermedad...) y que viven con los tíos o los abuelos, entre otros muchos que ahora se me olvidan y otros que no cito por no extenderme más.
Hacéis escándalo y escarnio de la Iglesia a partir de unas mínimas excepciones en los abusos sexuales del clero sin caer en la cuenta de que estos abusos se han cometido debido a la orientación homosexual de los abusadores, y no a su condición clerical. Incongruente.
Y aquí no me queda más remedio que ponerme serio y grosero, porque este es un tema que me toca muchísimo los huevos. Un cura pederasta lo es independientemente de que sea homo o heterosexual. De hecho, las
estadísticas de abuso sexual infantil muestran claramente que entre el 80% y el 95% de los abusos los cometen
hombres heterosexuales y sin embargo, ustedes insisten una y otra vez en relacionar homosexualidad y pederastia. En concreto, aunque ocurren en todos los ámbitos sociales, aunque la mayor parte ocurre en el interior de los hogares y se presentan habitualmente en forma de tocamientos por parte del padre, los hermanos o el abuelo (las víctimas suelen ser, en este ámbito, mayoritariamente niñas), es decir, en esas "perfectas" familias católicas con un padre y una madre que usted dice defender, aunque aun no se sabe de quién ni cómo las defiende.
Identificáis las tendencias homosexuales que se hayan podido fraguar en el desarrollo de una persona con la promiscuidad y el exhibicionismo. ¿Es que todo aquél que tiene tendencias homosexuales las alimenta y las explota haciendo ostentación de ello? Sabes que no y que muchos homosexuales están hasta la coronilla de que se haga bandera política de su condición sexual. Incongruente.
¿Cómo dice usted, don Mariano? Ahora sí que se le han cruzadolos cables, porque son ustedes precisamente los que se empeñan en relacionar homosexualidad con vicio, promiscuidad y exhibcionismo. Si quiere, hablamos de la promiscuidad y el exhibicionismo heterosexual, o de los padres de familia católicos y casados que se van por ahí a tener sexo con hombres en cuanto su mujer les da la espalda, en muchos casos pobres reprimidos y víctimas de haber crecido en ambientes caracterizados por la "libertad" que usted defiende.
Ah, se me olvidaba. No se desarrollan "tendencias homosexuales", está usted dando a entender que cree en el mito acientífico de que la homosexualidad es algo que se adquiere mágicamente.
Vendéis la condición antinatural del comportamiento homosexual como un triunfo de la inteligencia humana sobre las estrictas leyes naturales. Del mismo modo cabría calificar el Holocausto judío, el empleo de las bombas atómicas o la masacre silenciosa del aborto. Incongruente.
Las "estrictas leyes naturales" son otras muy distintas de las que ustedes se inventan en sus delirios religiosos, no hay nada que vender. Mucho más grave es su obsesión con la antinaturalidad, que aun no ha conseguido nadie demostrar de ninguna forma. Ya hablamos de ello en dos posts: "
contra natura" y "
contra natura II"
Y termina don Mariano (y yo, este largo, larguísimo post) diciendo
"deja a nuestros hijos en paz.", es decir, con la frase habitual entre las personas de su clase, el hipócrita
"¡Piensen en los niños!" cuando precisamente yo pienso en los niños, en todos esos niños que viven agobiados porque son homosexuales y no se lo pueden contar a un padre que los mandará a un psicólogo, o que no lo pueden hacer público en un colegio opusino donde el entorno no anima precisamente a salir del armario. Yo sí pienso en los niños, don Mariano, y no en las mentiras reaccionarias que, por más que ustedes se empeñen, no son una garantía de libertad.